Mi Sueño Juvenil nº 87005

Cotilleando en una exposicion, Madrid 2003.

Últimamente en mis noches de ventilador no hago mas que soñar. Estaba en una tarde calurosa con sol escondido en lo alto del Aljarafe, Sevilla lentamente se sumerge en la noche, pero muy lentamente pongamos que a un 10% de su velocidad normal, paso por la zona del rio, mucho mas mediaval y suburbial que de costumbre. Me dirijo a un bar tipico de esos de mesas de barricas de vino y paredes blancas decoradas con carteles de ferias antiguos, cabezas de gamba, serrin y servilletitas en el suelo. Es el tipico bar de amigos, me siento con un espiritu juvenil grimoso, paternalmente castrado, pegado a mi padre, soy incomodamente pequeño y me veo vastante humillado. Le pregunto a mi padre porque no vamos al bar de siempre y el me dice que le da vergüenza ver a gente conocida, no me lo llega a decir pero yo lo intullo. Ya dentro del bar alborotado me agarraa fuertemente la cabeza a modo de un cariño algo forzado, sobre todo fisicamente. Mi cuerpo es un pelele estraño de carne y huesos blandos, en ese momento coje mi cuello en sus brazos para saludar a unas parejas que desde lejos sin hacercarse nos avientan las manos, se pierden al fondo del bar producto de nuestro alejamiento teteatral. Busco el servicio que esta en medio de la cocina (seguramente mis ganas de hacer pis van mas alla del sueño), para mi asombro las cocineras estaban haciendo pis en los urinarios de hombres que para mas señas estan a un metro sin separacion de los fogones, yo alucinado pienso que prefiero no usarlos, su disposición es absurda, el mas bajo esta a mas de un metro del suelo, son extraños, mal alicatados de diseño y tamaños inviables para cualquier usuario del mundo de los no sueños. Le pregunto algo asombrado a una de las cocinera como usar los servicios y ellas se rien, me dicen que los de los clientes esta justo al lado, que esos son los de empleados. Los WC´s estan abarrotados asi que me aguanto las ganas, total ya despertaré. Me quedaba observando curioso el ambiente, lleno de sevillanos y de guiris todos chillones y exagerados, todos vestidos de blanco... de repente sale un travesti que parecia como si al sobrino de Tony Manero le ponemos un a peluca y nos lo llevamos a lo mas asrcastico de los carnavales de cadiz, un gracioso andaluz le dice con todo el arte sevillano que es capaz de generar en un sueño de uno que es mas catellano.

-Y tu chaval no crees que me merece la pena entrar en el de chicas? (todo absurdo)

Volando a Lintz 2005.

Después cambio como por fadeo de escenario y sigo el paseo por mi onírica ciudad. Me fijo que el rio Guadalquivir esta con poquísima agua, a demas el curso va cambiado de direccion y la poca agua que lleva tiene una extraña y fuerte corriente, extreamadamente transparente y limpia.

Hay gente con botas de agua y sombreros de paja limpiando o rastreando el fondo que no tiene nada de fango, si lo comparamos con el rio real que es 50 por ciento fango 50 agua comprenderemos lo extraterrestre del paisaje, un simple fondo limpio con pocas piedras y algo de algas sin ningun tipo de basura sustitulle a los mil tesoros de mil años escondidos, barcos undidos, mobiliario urbano que a alguien se le fue de las manos, tesoros de cuando sevilla era la puerta de oro de lal mundo recien conocido. Me maravilla la vision del rio de esa manera me deleito en mi sueño sabiendo que lo que veo y siento es espectacular. De repente estoy viendo en la televisión autonomica andaluza una especie de culebron o mas bien fotonovela en movimiento (algo muy raro) con una historia de amor, exageradamente de autor para ser un culebron. ¡Un culebron independiente!, progre, quizas algo pretencioso y tambien naif, pero me gusta! (qu¡zas porque me recuerda a mis ejercicios de estudiante) al final del capitulo un narradador dice:

-Buena historia de amor es, cuando esta empieza después de un final feliz. (Rara elucubracion pienso ahora yo)

El hilo argumental del sueño me hace acercarme a la chica de la fotonovela que desaprarce de la emisión y aparece ante mi como cuando esperas a tu primera novia en la puerta de la escuela. yo ahora entro en los decorados ¿o es ella la que sale de ellos? y me acerco dandole un beso, nos vamos a un banco y alli estan Jesús, Alberto, mi amigo Dani y mas chicas que no conozco aunque me son familiares. Yo les comento que me encanta el guion que se nota que es de ellos. La verdad que me encanta hasta lo que yo recuerdo (en los sueños las cosas cambian y algo no es lo que és porque deja en cualquiermomento de serlo) y la voz del narrador joven, nada apijada, y muy sevillana pero sin ser exagerada (o quizas un poco?) y que decir de mi actrizilla con nariz rara que me resulta preciosa. La musica de la terraza resulta que es un disco mio y esta a un nivel altísimo, molesto para los oidos, distorsiona en los viejos altavozes sacados a la calle y no deja escuchar, yo miro hacia dentro del bar con cara de poker como buscando la conexion visual con un camarero (Curiosamente ayer en la piscina, pusieron la musica tan fuerte que fuy a quejarme y la bajaron. Era extresante), pareze que soy yo el unico que se percata del molesto nivel sonoro. Sigue el atardecer y ya casi es de noche, pero una noche con ganancia, con ruido visual en el ambiente, como tirada a 3000 asas, como grabada con una camara de video. Me veo por arte de cómo si fuera un reportaje ( con planos medios, detales, panoramicas, montaje de planos soñados) mas lejos del centro, estoy en la zona de las traseras del colonial parque de Maria luisa, el rio sigue raro como antes estaba, sigue limpio, muy limpio demasiado limpio, y ahora oscuro muy oscuro, me crea un punto de inquietud su vision marciana. De repente abren unas compuertas gigantes que yo antes no veia y una enorme lengua de agua oscura, densase abalanza rio abajo, en sueños rio arriba hacia lo que fue la Expo 92. La imagen es acojonate, una inmensa, densa, revuelto gris de agua, tesoros y fango lengua de agua que se introduce inparable pol vacio lecho encajado, siguiendo su caminito virulentamente no salpica nada, no hay peligro todo parece estar controlado aunque transmite la sensacion de nivel maximo de peligrosidad, como cuando hay inundaciones y sube el nivel del agua justo hasta un centimetro de los limites. Los chavales de los barrios con sus bañadores largos surfistas exagerados se tiran en las tablas a manera de dibujos animados, de goma irrompibles salen volando, engullidos por el rio demente, escupidos energicamente por los aires, flotando, emergiendo suavemente, sobre excitados y todos divertidos, gritando, silvando, chillando frenéticamente. Sobre, entre, bajo las flubiales olas.... Yiaaaa, yuuu!! Zassss ¡!... Se lo estan pasando en grande y yo disfrutando de tan alucinante espectáculo.

Arco, Madrid 2005.

Miro debajo del pollete de cemento en el que estoy subido y veo una cara conocida, le digo: tu estudiabas en tomares? Y el me dice que si, intento ponerle nombre, después de un Miguel, y un Carlos, el me replica un Alberto. La verdad que me quedo con Carlos que no se por que, tiene cara de Carlos. La conversacion es escueta y forzada, los temas de siempre. ¿ Que tal te va?... me parece una pregunta arriesgada, sobre todo al verle rodeado de niños de 15 años que parecen ser sus compañeros de juegos adulterados. Estoy otra vez en la terraza y le pregunto a mi amiga por que han vaciado el rio, ella me cuenta una historia como sacada de su fotonovela, total mente absurda pero que a mi me encandila. Hace 50 años a una hermosa jovencita morena del barrio de triana se le cayó un anillo de pedida al rio... ya anciana murio sin poderse casar con su amado ni recuperar su anillo, hace unos meses como homenaje el ayuntamiento habia decidido recuperar su anillo, asi que por primera vez en miles de años las aguas el guadalquivir vaciaron por cuestiones de amor. Y facilmente lo encontraron. ( En ese momento me viene a la cabeza la imagen den un operario con botas de goma y sombrerito de campo enseñandeome alegre recien cojido de entre las limpias algas el anillo en su mano) . En un recobrado atardecer en una terraza de una calle imaginaria.. me despierta la sed.

Composicion en Transito, Zurich 2005.